P-1: Carlos para empezar, nos puedes decir tu nombre completo, fecha y local de nacimiento?
R - Yo me llamo Carlos Esteban Escalante Estrada, nací en Lima el 17 de septiembre de 1949.
P-1: ¿Y cual es la organización que representas acá?
R - Yo trabajo en el Instituto de desarrollo Urbano – SENCA y también represento al Grupo por el Derecho a la Vivienda, que es una red de Instituciones, y al Colectivo Urbano Perú.
P-1: Nos puede decir un poquitín qué hace Senca y cómo empezó tu envolvimiento con eso?
Senca trabaja apoyando el esfuerzo de organizaciones sociales para defender su derecho a la vivienda. La historia de SENCA está muy ligada a la organización popular que luchaba por acceder al suelo. Yo me enteré por una compañera de la universidad, habíamos hecho un trabajo conjunto y sabíamos las cosas que nos gustaban, ella me dijo yo fui, hace más de 25 años.
P-1: Y qué estudiabas tú?
R - Arquitectura. Había estudiado arquitectura y habíamos hecho un posgrado juntos en Holanda. Habíamos compartido cosas sobre la vivienda popular en América Latina, las estrategias para mejorar la producción de la vivienda.
P-1: Y hoy día en qué actúa, cómo funciona?
R - El Instituto funciona básicamente en tres áreas. Un área que trabaja el tema del derecho a la vivienda, que es donde yo estoy. Hay un área que trabaja temas más relacionados a aspectos ambientales, de saneamiento ecológico, y una tercera que ve temas más económicos. Yo específicamente estoy en la parte de incidencia y política, que es lo que estoy haciendo en los últimos años.
P -1: Y las otras dos organizaciones?
R - Son redes. El Colectivo Urbano Perú es una red que agrupa a varias ONGs. Hace algunos años formamos el Comité de Campaña por el Derecho a la Vivienda y la otra red, que es Grupo por el Derecho a la Vivienda, es muy parecida pero incluye a organizaciones que trabajan en los temas de los derechos de manera más amplia,...
Continuar leituraP-1: Carlos para empezar, nos puedes decir tu nombre completo, fecha y local de nacimiento?
R - Yo me llamo Carlos Esteban Escalante Estrada, nací en Lima el 17 de septiembre de 1949.
P-1: ¿Y cual es la organización que representas acá?
R - Yo trabajo en el Instituto de desarrollo Urbano – SENCA y también represento al Grupo por el Derecho a la Vivienda, que es una red de Instituciones, y al Colectivo Urbano Perú.
P-1: Nos puede decir un poquitín qué hace Senca y cómo empezó tu envolvimiento con eso?
Senca trabaja apoyando el esfuerzo de organizaciones sociales para defender su derecho a la vivienda. La historia de SENCA está muy ligada a la organización popular que luchaba por acceder al suelo. Yo me enteré por una compañera de la universidad, habíamos hecho un trabajo conjunto y sabíamos las cosas que nos gustaban, ella me dijo yo fui, hace más de 25 años.
P-1: Y qué estudiabas tú?
R - Arquitectura. Había estudiado arquitectura y habíamos hecho un posgrado juntos en Holanda. Habíamos compartido cosas sobre la vivienda popular en América Latina, las estrategias para mejorar la producción de la vivienda.
P-1: Y hoy día en qué actúa, cómo funciona?
R - El Instituto funciona básicamente en tres áreas. Un área que trabaja el tema del derecho a la vivienda, que es donde yo estoy. Hay un área que trabaja temas más relacionados a aspectos ambientales, de saneamiento ecológico, y una tercera que ve temas más económicos. Yo específicamente estoy en la parte de incidencia y política, que es lo que estoy haciendo en los últimos años.
P -1: Y las otras dos organizaciones?
R - Son redes. El Colectivo Urbano Perú es una red que agrupa a varias ONGs. Hace algunos años formamos el Comité de Campaña por el Derecho a la Vivienda y la otra red, que es Grupo por el Derecho a la Vivienda, es muy parecida pero incluye a organizaciones que trabajan en los temas de los derechos de manera más amplia, como la Coordinación Nacional de Derechos Humanos y la Plataforma Internacional de Derechos Humanos en el capítulo peruano, es un poco más amplia, pero es casi lo mismo.
P-1: Nos puedes contar un poco del contexto en Perú ahora mismo, o de donde actúan vosotros, describir las problemáticas que tenéis?
R: El contexto peruano actual en el campo urbano y en el campo de la vivienda es de una enorme vulnerabilidad. En los últimos 50 o 60 años hubo un proceso muy grande de ocupación del suelo - en Lima y en varias otras ciudades - que se hizo de una manera muy informal. La política predominante en este tiempo, desde el Estado, ha sido dejar a las poblaciones que ocupen y de tanto en tanto regularizar a esa ocupación. Lo que sucede en Lima y en otras ciudades del país es que están en un desierto y eso hace con que haya mucha tierra del Estado, tierra pública. Con el proceso migratorio - porque es la capital del Perú, la que tiene más dinámica económica - la gente se asentaba en terrenos que eran públicos, como laderas de cerro, arenales, antiguos botadores de basura y zonas inundables. Lima está rodeada de ese tipo de tierras y el gobierno no se hacía cargo del problema. La gente se asentaba y poco a poco llegaban unos servicios y les dejaban el título. Entonces esto ha generado una enorme vulnerabilidad porque la gente ocupó en cualquier sitio, construyó sin asistencia técnica, en zonas que tenían un especial atractivo se asignaron tremendamente, se ocuparon zonas de mucha vulnerabilidad. Hoy día tenemos a algunos sectores de ciudad que ocupan laderas de cerro, algunos de ellos donde ha habido - hace muchísimos años - actividad minera y por lo tanto son cerros que ya están escarbados. Hay también la zona del Antiguo de la ciudad que, como ha pasado en la mayoría de los países de América Latina, fue abandonado por los sectores más pudientes y transformada en tugurios donde hay una actividad comercial muy precaria. Los centros urbanos también están muy deteriorados. Viviendas muy antiguas que pueden tener 200 o 300 años y que cuando venga un remezón, puede haber mucha mortandad en el país. Esa es la situación actual. Lo que a nosotros nos preocupa tremendamente es que en estos momentos la organización popular no está pasando por su mejor momento. La gente no se está movilizando como antes por acceder a los servicios básicos y los bolsones de organizaciones activas son relativamente minoritarios en una enorme ciudad de más 8 millones de habitantes. No hay, en este momento, la fuerza política para poder imponer una agenda, una prioridad, una forma de ver las cosas. En esa lucha estamos.
P-1: Y en tú opinión qué hace falta para que la gente se movilice?
R: Esa es una pregunta muy difícil porque parte del problema es que los partidos políticos que activaban el tema de los derechos en nuestro país, los partidos progresistas han tenido un decaimiento muy fuerte, sobretodo en Lima. En el resto del país no tanto, pero en Lima han retrocedido enormemente. Se dividieron, se pelearon entre ellos, se aislaron de las luchas populares, fueron derrochados, espero que transitoriamente. El plano de vista que está más asentado en la ciudad no es el de la defensa de los derechos sino más bien el de tratar de conseguir más y el de buscar soluciones individuales a los problemas. En el país hace falta un relanzamiento de un trabajo político y ideológico que le de una mayor perspectiva al tema de los derechos a la vivienda. Si tenemos un problema, acudimos a la autoridad, que no puede resolver, entonces aciertan las condiciones que la autoridad les plantea y vamos tratando de resolver los problemas. Por ese camino lo que sucede es que desde el Estado nunca hay los recursos suficientes, son muy pocos los que pueden resolver los problemas y como no transforman estos reclamos en una demanda más política y menos en una plataforma alternativa, no tienen el peso suficiente para dar un combate que cambie la regla del juego.
P-1: Cómo surgió la relación con la Alianza Internacional de Habitantes?
R: Con la Alianza Internacional de Habitantes surgió a partir del encuentro de pobladores en México al cual tuve la suerte de asistir. Esto fue en el 2000. Yo asistí acompañando a unos dirigentes con los que estábamos trabajando. Todavía no existía la Alianza pero sí había una corriente que planteaba la necesidad de que los pobladores tengan su propia organización. En esos momentos los pobladores y las Instituciones como la nuestra compartíamos una misma organización y eso daba como resultado que la voz que predominaba era siempre la voz de las Instituciones y no la de los pobladores. Luego se fueron dando pasos hacia la organización de los propios habitantes. En SENCA tomamos la decisión de acompañar ese proceso, entendíamos que era urgente, necesario y positivo que los pobladores tengan su propia organización. Nosotros hemos hecho lo mismo en el Perú. Inicialmente hicimos una campaña por el derecho a la vivienda con las instituciones de la sociedad civil y algunas organizaciones sociales. Una lucha para conseguir leyes más adecuadas para avanzar en el derecho a la vivienda. Se vio con claridad que los pobladores tenían que reconstruir su antigua organización, obviamente ya con otras formas organizativas. El país había cambiado mucho y pusimos nuestro granito de arena para que se reconstruya una Federación de Organizaciones Vecinales en Lima y Callao que es la FOVELIC. Entonces ellos tienen su propia organización, con la cual nosotros nos relacionamos pero desde el espacio de las instituciones. Y allí establecemos las relaciones más horizontales que podemos, cada uno como un actor.
P-1: Cuales son tus impresiones hasta ahora del FUS (Forum Urbano Social) y su relación, ligación con el FUM (Forum Urbano Mundial)?
R: Yo diría que se está dando una relación que no es una sorpresa, que es algo que se preveía. Hay algunos canales de vinculación pero, hasta donde yo he podido notar y participar, son canales más formales que reales. El Forum Urbano Mundial es un Forum muy institucionalizado donde las organizaciones participan pero no de una manera protagónica. En el Forum Social más bien se nota el calor de las organizaciones. Las vinculaciones entre los dos Foruns, más allá de participar un rato aquí un rato allá, no se ven con claridad. A pesar de los avances también podemos constatar que hay otras cosas que no están caminando como deberían caminar, siempre hay una esfera oficial y siempre hay esfera social, digamos, me imagino que tendremos que andar mucho tiempo para ir construyendo mejor relación entre ambas, a pesar de que en la esfera oficial estén compañeros nuestros. Porque estando en el lado oficial uno tiene que cumplir con algunas cosas, hacer algunas cosas que y si uno no quiere hacerlas mejor no te metas. Es cierto que desde del Forum oficial se pueden hacer cosas que si no estás allí no las puedes hacer. En ese sentido yo no me apresuro. Ahora me estás haciendo ver cuando he nacido. Yo tengo muchísimos años, son cosas que sé que van a tomar su tiempo, no hay que desesperarse.
P-1: Que expectativas tienes para la Asamblea Mundial de Habitantes el año que viene en Dakar?
Es un esfuerzo muy importante. Estamos muy cerca de ese Forum Urbano Mundial y la expectativa que tengo es de que al calor de ese proceso se consoliden o por lo menos avancen, reflexionen, comparen y replanteen algunas de sus practicas. Cuando yo pienso en el impacto que puede tener eso en el movimiento urbano en el Perú pienso que será un impacto positivo, que mejore el nivel de conciencia y de organización en el Perú. Hace un rato te describía la situación en la que estamos, cuando uno comprara, por ejemplo, con el movimiento urbano aquí en Brasil, creo que hay mucho que aprender. Sobretodo aprender que el camino que predomina hoy día en Lima no es único, hay muchos otros caminos, lo que pasa es que nosotros no los vemos. Que los dirigentes tengan la posibilidad de comparar sus experiencias con otras de otros sitios es de altísimo provecho. Que nosotros se lo contemos está bien pero no es lo mismo que participar. Para una organización peruana, aunque sea pequeña, estar en la Asamblea Mundial de Habitantes y compartir con otras organizaciones es un esfuerzo importante. En ese sentido tengo grandes expectativas.
P-1: Y Carlos, si tuvieras que elegir un gran logro desde que has empezado a trabajar con esta problemática, cual sería?
R: Un gran logro? Yo diría que impulsar el Comité de Campaña en la primera década del nuevo siglo. Fue una buena decisión. El Comité de Campaña era lo que en ese momento se llamaba una iniciativa de la sociedad civil, donde instituciones y organizaciones sociales juntos tomamos el objetivo de luchar por el derecho a la vivienda en el país. Nos propusimos a hacer una campaña para colocar en la Constitución de la República el tema del derecho a vivienda. En el Perú antiguamente, en la Constitución de 93, estaba el derecho a la vivienda – de una manera limitada pero estaba – y luego en la siguiente Constitución que hizo Fujimori, la sacó, la eliminó. Nosotros tomamos la decisión de impulsar ese proceso. Pero uno toma decisiones y luego las cosas van por otro lado, surgen caminos que uno no había previsto, eso fue lo que pasó, el Comité no hizo solamente una Campaña sino que se fue tornando un referente que bregó en un momento sin tener mucha conciencia de que había que bregar. Abrió caminos. Luego vino la FOVELIC, que es la organización de los propios pobladores. Cuando tomamos la decisión del Comité de Campaña no era posible hacer la FOVELIC. Uno toma decisiones, las cosas van saliendo y así es la vida. A veces somos soberbios, pensamos de que podemos definir y hacer grandes cosas y la vida te va enseñando y dando otras cosas.
P-1: Has contado un gran logro y ahora puedes pensar en un gran reto?
El reto obviamente es que esa Federación se consolide el sentido de que encuentre con claridad un rol que jugar en la escena urbana en mi país. Tiene que engarzarse y establecer una mejor relación con sus bases, lograr conformar una corriente popular fuerte en el país, porque se eso no sucede las posibilidades de decidir sobre los problemas de vivienda, sobre las políticas de vivienda son muy pocas. Ningún gobierno atiende a los buenos argumentos, atiende a las luchas, a las movilizaciones a la fuerza social. Los argumentos vienen después. Felizmente que es un reto que compartimos con varios. Ese fue el logro de Comité. Logro de varios compañeros e instituciones y compañeras también y varios dirigentes. Ya tenemos ese compromiso y hay un grupo, entonces con ese grupo tenemos que avanzar.
P-1: Si tuvieras que elegir un deseo o un sueño personal tuyo para el futuro, cual sería?
Yo quiero dedicar los próximos 10 años de mi vida a entender mejor como es lo que fuimos construyendo, del punto de vista urbano, en mi país. Como lo fuimos construyendo, qué hubo? Qué pasó? Que decisiones se tomaron. La historia de mi país es una historia muy lesionadora, con un pasado increíble y con una derrochas muy trágicas. Es una historia muy compleja. Hemos construido un país muy complejo, sobre las basis de un antiguo imperio, pero sin reconocerlo y transformando el territorio en algo muy vulnerable. Yo quiero conocer este proceso. Puedes tener algunas ideas en relación a cómo se hicieron las cosas, cuales fueron las decisiones que se tomaron, porqué y quienes las tomaron. Yo espero dedicarme más tranquilamente a esto en los próximos años.
P-1: Y si tuvieras que eligir un sueño o un deseo para la lucha, que es lo que está por detrás de todo eso? Qué te haría feliz?
Me haría feliz si pudiéramos cambiar efectivamente las políticas de vivienda y las políticas urbanas en el país. Eso de hecho implica un cambio político. A mí me haría muy feliz que reconstruyamos una fuerza política capaz de cambiar el derrotero, si eso ocurre ya podemos estar tranquilos. Yo ya tengo 60 años entonces tengo que pensar qué es lo que voy a hacer en los próximos 10 años. Si en estos 10 años pudiese haber ese cambio estaríamos felices.
P-1: Cómo ves el papel de las nuevas generaciones, de los jóvenes?
Es un papel clave porque son ellos los que van a tener que realizar estos sueños. Algunas cosas son muy alentadoras, yo veo a una juventud con un gran apego a ideales de justicia y con moral a toda prueba, estoy pensando en algunos chicos que conozco. Pero digamos que el contexto en el que se van a desenvolver es un contexto distinto al que nos desenvolvimos nosotros, asumir esas tareas era más fácil en el sentido de que mucha gente lo hacía, no llamaba tanto la atención. Ellos van a tener que estar en un contexto más difícil pero lo van a hacer a su manera, totalmente distinta a como nosotros lo hacemos. Con seguridad no vamos a estar nada de acuerdo pero tienen que hacerlo, sí tengo la esperanza de que lo van a hacer. Y que no nos consulten mucho, porque vamos a discrepar, que tiren para adelante y nomás.
Recolher